Pese a Mandamientos vivimos ambiente de muerte y corrupción: Arzobispo

13/12/2020

Ángeles González Ceballos

Xalapa, Ver.

El arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, lamentó que a pesar de que existen los 10 Mandamientos y particularmente el quinto Mandamiento define "no matarás", nuestra sociedad vive en un ambiente de muerte, de asesinatos, extorsiones, secuestros, feminicidios.

Asimismo, de destrozo de cadáveres, de ajustes de cuentas, de todo lo que se conoce y asusta.

Aunado a ello, hay quienes promueven que se legalice el aborto y a eso le llaman progreso y derecho.

Por ello, preguntó a las madres presentes en la eucaristía si se sienten con el derecho de matar a uno de sus hijos y respondió que es absurdo.

"Pero curiosamente muchas mujeres luchan por eso. Y hay algunas diputadas que siempre están en el Congreso plurinominales y su objetivo principal es que se establezca en Veracruz, que el aborto pueda hacerse legalmente hasta los tres meses de embarazo. Así empiezan, ya después le siguen a los seis. En Estados Unidos ya se admite hasta los 9 meses", lamentó y preguntó en qué mundo vivimos que no se respeta la vida ni de los propios familiares.

Reyes Larios dijo también que llaman la atención las "damas feministas" que pintarrajean la Catedral, destruyen negocios y no respetan a nadie, que siempre traen pancartas donde piden aborto, libre, seguro y gratuito.

"Para que vean que ni eso vivimos (los mandamientos)... no robarás y todo el ambiente de corrupción, todo nuestro ambiente, a veces decimos que los gobiernos porque ahí hay más, pero también en otros ambientes y nosotros mismos podemos caer en la corrupción", señaló.

El jerarca católico aseveró que los ciudadanos pueden incurrir en ese delito cuando se pagan moches, se cae en el compadrazgo, entre otros.

Por ello, dijo que le pide a Dios que siquiera viviéramos los 10 mandamientos, porque las buenaventuranzas son palabras mayores, eso es para quien tiene la base de los mandamientos.

Este tercer domingo de Adviento, en donde se celebra a la alegría, resaltó el evangelio que invita a abandonar la mediocridad, la tristeza y descartar el desaliento.

"Ser luz y alegría han de ser actitudes constantes en nuestra vida cotidiana para testimoniar a Cristo, eso significa que seamos cristianos capaces de despertar la fe en las demás personas, contagiar luz y vida y allanar los caminos para propiciar el encuentro con Jesús", indicó.