De universitarios a secuestradores

*Dos de los tres detenidos por el secuestro de una menor de edad en Córdoba eran universitarios, novios y con un aparente futuro prometedor

Urbis Veracruz 

Córdoba, Ver. “El dinero que llega fácil, fácil se va. El dinero que llega por mucho esfuerzo y dedicación fácil se va también a la v…”, escribió Katia en Facebook, un día después del secuestro de Fernanda, una menor de edad, privada de su libertad en la ciudad de Córdoba, en la zona centro del estado de Veracruz.

La joven de 21 años, su novio Carlos y su amigo Jair son señalados como responsables de plagiar a la adolescente el pasado 23 de octubre, afuera de un gimnasio del Fraccionamiento Nuevo Córdoba.

A las 2:00 de la mañana de este jueves, efectivos de la Unidad Especializada en Combate al Secuestro habrían detenido en flagrancia al trío de ex universitarios en una casa de seguridad en el Fraccionamiento Jardín, de la ciudad de los 30 caballeros.

La liberación de Fernanda, sana y salva, corrió como pólvora en el municipio. Su familia es muy conocida pues su padre es uno de los pediatras más reconocidos de la región.

Al mismo tiempo, amigos de los detenidos no daban crédito de los señalamientos que ahora pesan sobre ellos, según contó uno de sus conocidos que prefirió el anonimato.

Katia y Carlos tenían una relación amorosa desde hace años. Ambos estudiaron una carrera universitaria, trabajaban y tenían un aparente futuro prometedor, por eso, nadie sospechaba que eran parte de una supuesta banda de secuestradores.

Durante los días que, presuntamente tuvieron en cautiverio a Fernanda, la chica posteó una fotografía con su novio. Justo el 25 de octubre, dos días después del crimen, redactó: “se viene algo muy bueno. Te amo”.

Ahora, esa publicación, y muchas otras de su muro, están plagadas de insultos, cuentas recién creadas que la acusan de secuestrar niñas.

Katia , decía, era egresada del Instituto Superior de Estudios Contables y Fiscales. Mientras que Carlos se presentaba como egresado de la Universidad del Golfo de México.

Éste último, según algunas personas que lo trataron, era un joven tranquilo, que practicaba deportes y alpinismo en el Pico de Orizaba.

Por ahora, la pareja y el tercer implicado de nombre Jair, que resultó lesionado durante el operativo de detención, están en manos de un juez de control para saber si el proceso lo llevan dentro de prisión.