Estudiante que recibió una bala pérdida en Córdoba lucha por sobrevivir

12/11/2025

*Sus seres queridos piden donadores de sangre para que puedan realizarle todas las cirugías que necesita

Rodrigo Barranco Déctor

Veracruz, Ver. Aarón Ulises Castro Juárez, de 22 años, estudiante de la Universidad Tecnológica de Cuitláhuac, lucha por su vida desde hace varios días, luego de recibir heridas de bala en un enfrentamiento en el que resultó ser víctima colateral.

Los hechos ocurrieron el pasado 27 de octubre de este 2025, cuando el muchacho regresaba a su casa a descansar en la colonia Antorchista, en la ciudad de Córdoba, en las altas montañas de Veracruz.

Lo que señalan testigos es que sicarios llegaron a esa esquina, conocida como “El Pueblito” y dispararon en contra de un motociclista, al que venían persiguiendo cuadras atrás.

El conductor de la moto murió al instante, pero resultado de esa agresión, dos ciudadanos que nada tenían que ver en el asunto resultaron lesionados con balas pérdidas, por lo que quedaron tirados en la calle.

Uno de los heridos era el estudiante Aarón Ulises, que fue trasladado en una ambulancia de la Cruz Roja Mexicana al Instituto Mexicano del Seguro Social de Orizaba, en donde intentan salvarle la vida.

“Aarón fue víctima de un terrible incidente: fue impactado de bala sin tener culpa alguna en un suceso totalmente ajeno a él. Actualmente, se encuentra hospitalizado y su estado de salud es delicado”, escribió un familiar.

Y agregaron: “La situación médica requiere de cuidados intensivos, cirugías y un largo proceso de recuperación, lo que implica gastos hospitalarios y tratamientos sumamente elevados que exceden por completo las capacidades de su familia. Cada día en el hospital es una lucha por su vida y un costo económico difícil de afrontar”.

Sus seres queridos han emprendido una campaña en redes sociales para recaudar fondos y para buscar donadores de sangre para las cirugías, todo se puede encontrar poniendo el nombre del afectado en los buscadores.

Por ahora, ninguna autoridad ha dicho nada al respecto sobre estos dos ciudadanos que luchan por su vida, sin deberla ni temerla, sólo realizan sus actividades normales.